El Criticomerón: Crítica de "Salvajes"

¡Buenas noches queridos amantes del 7º arte! No le he asignado un día todavía a la sección de Alejandro, pero tiene pinta de que el Lunes va ser su día, y que va sustituir a "La recomendación de la semana", pues no deja de ser una recomendación también.

Espero que para la semana que viene tenga las cosas más claras y os pueda decir los cambios que vaya a realizar o no, mientras tanto os dejo con la crítica de "Salvajes" hecha por Alejandro.

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Salvajes: fieras por fuera, peluches por dentro.
 

Stone nunca ha sido santo de mi devoción, lo admito. Lo único que me ha gustado de este director fue la adictiva "Asesinos Natos" y la correcta (y creo que algo sobrevalorada) "Nacido el 4 de julio"... y de rasquis meto a "JFK: Caso Abierto. El resto de su filmografía no ha acabado nunca de calarme. A pesar de ello reconozco que siempre he considerado que es un hombre que ha rodado lo que ha querido, sin claudicar a las presiones de Hollywood y mostrando siempre sus opiniones políticas y su visión del mundo que le rodea. Pero a pesar de ello y sin ser mal director no llega al nivel de los grandes del momento.

Es por eso que cuando vi el tráiler de "Salvajes", me sorprendió; parecía que Stone volvía a su lado más crudo y crítico tras unas últimas películas muy irregulares (de hecho, su última época deja mucho que desear). Me habían convencido en menos de tres minutos y apunté la película para verla en cuanto pudiese. Este fin de semana se estrenó y allí que me fui.

La premisa, sin entrar en spoilers, era por lo menos emocionante: tenemos drogas, traficantes y matones, un cártel mexicano y hasta policías malotes y corruptos... no me negaréis que no es una mezcla explosiva. Y todo manejado por un Stone que parecía volver a sus viejos tiempos. Ciertamente tenía muchas ganas de verla. Pero siento decir, que al salir del cine me quedé con una sensación de ver un "quiero y no puedo".

No es que se trate de una mala película, ni mucho menos; a tenor de lo que hoy en día puebla las carteleras, es más que decente y muy entretenida. Pero siendo Stone el director, se me antoja al final una película sin garra y que deja cierto aroma de no querer ser demasiado transgresora. 

Sin embargo cabe señalar que por mi parte agradecí ver ciertas pautas muy "Stonianas" a lo largo de la película: personajes extraños, diálogos irónicos y no exentos de tacos varios, acción de peso (aunque algo escasa) y un buen trabajo de dirección. No se puede decir que no es una película de Stone, porque contiene todos esos elementos bien marcados. Por eso no sorprende saber que el guión lo escribió el mismo director, basado en un libro considerado uno de los 10 mejores del año 2010, y que según los expertos es lo más parecido a ver "Infiltrados" en letras.

El trío de protagonistas tienen los perfiles clásicos de las películas de Stone: personas normales abocadas a una vorágine de violencia y salvajismo. Pero lo que más destaca de la película son los secundarios que acompaña a los protagonistas. Actores de lujo, y de hecho dan los mejores momentos de toda la película; ellos son Salma Hayek, John Travolta y Benicio del Toro. Principalmente este último acaba siendo el mejor personaje de todos, una mezcla de loco y astuto, cuya mirada perturbadora quizás desemboque en un clásico dentro del universo propio del director americano.

Un buen entretenimiento y que gustará a cualquier amante del buen cine pero que puede olvidarse al poco tiempo de haberla visto. Y al menos para mí, siempre quedará la siguiente pregunta: ¿cómo habría sido esta película si Stone la hubiera escrito 20 años atrás?

Alejandro.