La otra cara de la moneda

¡Buenas noches lectores! Yo no digo nada esta noche, le dejo el testigo a Ivan Gonzalez. Solo avisaros que la siguiente crítica de "El caballero oscuro" tiene spoilers, es decir, abteneros de leerla los que no hayáis visto la peli.

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Como cada jueves, "La otra cara de la moneda" analizará, estudiará y criticará (positivamente o negativamente) los aspectos éticos y el mensaje del film de un modo profundo y analizado.

La otra cara de la moneda II - "The Dark Knight"

 
Aprovechando el enorme eco de la última entrega de la trilogía de Christopher Nolan, y en los tiempos que corren, es imprescindible hablar sobre el papel de un actor tan aclamado, valorado y premiado como Heath Ledger, en el rol del principal némesis del mítico Batman, El Joker.

El Joker es, sin duda, uno de los villanos más temerarios y temidos, se podría decir incluso que el más peligroso. Heath Ledger, por su parte, consigue de una forma espectacular transmitir la complicada, pero a su vez sencilla ideología. Pero, ¿porqué tanto protagonismo al némesis? ¿Qué lo hace diferente? ¿Qué es lo que convierte a este villano en un ser temido? 

 

La psicología del Joker, así como sus intenciones son sin duda las cualidades que diferencian a este villano de cualquier otro. Una mente perturbada aparentemente sin miedo a nada, sin miedo a morir; no busca dinero, fama, riquezas... simplemente el caos es lo que le atrae, tal y como se cita en varios momentos de la película, ''La gente sigue una rutina, haz algo que se salga de ella y crearás el caos''. Es por eso que el superhéroe murciélago no sabe como contraatacar al Joker poniendo al alter-ego de Bruce Wayne al límite en todos los sentidos posibles, ya que le hace cuestionar sobre sus ideales y creencias (''No ejecturarás'', por ejemplo).

Explicada brevemente la ideología del famoso enemigo de Batman, ¿qué papel juega en la película? He aquí la pregunta clave; que tiene 'corrupción' como respuesta. Pese a ser una película de acción con algunos tópicos de este género de películas, son las intenciones del villano el punto principal de la drama: ¿Es todo el mundo corrompible? 

 

 La película, como no podría ser de otra manera, deja ver que SÍ es la respuesta, a excepción del héroe enmascarado. Hearvy Dent, co-protagonista en el film cuyo cometido es encerrar a los villanos y malhechores, es la más clara manifestación de la corrupción de los políticos actuales (obviamente no por los actos que comete una vez corrompido, si no por mostrar esa debilidad de manipulación).

Es por eso que recomiendo esta obra maestra, además de por sus excelentes interpretaciones, efectos especiales y calidad en general, es la drama lo que haría recapacitar a más de un político, policía, abogado... e incluso al más simple espectador sobre los límites de la locura, de la manipulación, de la corrupción, del sentido de la justicia y de lo correcto.